Los dos menús empleados en Mount Wutai.
(SPANISH.CHINA.ORG.CN)- futsanglung (Reino Unido) Ordenas algo del menú con precios bajos, pero cuando preguntas el costo al final de la comida, te muestran una carta con precios inflados. Para evitar esto, hazlos escribir el precio de la orden y dejar una copia sobre la mesa.
Este truco se le hace tanto a extranjeros como a chinos.
vf84tcat (Estados Unidos)
Soy estadounidense. Hace muchos a?os volvía de un viaje de negocios en Tailandia y decidí detenerme en Beijing durante algunos días antes de volver a Washington. Nunca había visto la Gran Muralla y quería tener la experiencia.
El tour fue excelente. Sin embargo, más tarde el guía insistió en llevarme a una peque?a planta de cerámica. Allí, una se?ora me llevó en otro tour donde me mostró cómo los artesanos hacían cerámica de cobre. Entonces me llevó a un cuarto de exhibiciones para ver qué artículo deseaba comprar. No había planeado comprar nada. Aplicó una gentil, aunque distintiva presión para que comprara “algo”. Queriendo aparentar ser un estadounidense respetuoso, dije qué diablos y escogí una peque?a vasija de cobre. Resultó costar 5.400 yuanes (800 dólares). Más tarde descubrí que esto es un enga?o dise?ado básicamente para los extranjeros. Jamás intentarían cobrar a un chino o algún otro asiático tanto dinero.
Dragons8 (Singapur)
En Sanya, la mayoría de las trampas pertenece a aquellos con acentos norte?os que administran restaurantes, incluso las personas del lugar son enga?adas, utilizando amenazas y fuertes tácticas de mano para acosar a los consumidores para que ordenen su comida.
Cuando preguntas el costo del pescado vivo en el tanque, dan el precio del corte de la garganta y lo matan allí mismo, golpéandolo en el piso. ?Cómo puedes negociar si el pez ya está muerto?
Mutuxingzhe (China)
Es una horrible trampa de viajes en la que he caído. Así que no crean en esos “tours de Beijing de un día” más baratos, que cuestan menos de 150 yuanes. El gremio es igual al de los ladrones o a los gángsters. Dicen que el tour incluye “la gran muralla de badaling”, pero te llevan a “jiayuguan”, incluyendo el “cementerio de la dinastía ming”, pero sólo te dejan echar un vistazo por la ventana del autobús y siempre te obligan a comprar, comprar, comprar y al final del viaje, todos los pasajeros son empujados para que entren a un centro comercial en un sótano y a través de una serie de trucos elaborados, un supuesto extranjero apareció, dijo un montón de mentiras para enga?arnos para que compráramos mermeladas al comprar algo más y al volver al autobús, el guía había desaparecido y poco a poco, nos dimos cuenta de que era un enga?o, pero el conductor sólo contestó groseramente “no tengo idea”.
Ratfink (Australia)
Ha habido conductores de taxi que han intentado enga?arme en ?frica, Italia, Hungría, Rumania, así como China, Indonesia y las Filipinas.
Lo mejor que puedes hacer es enterarte de cuál es el precio promedio y saber la ruta aproximada que se toma para llegar a los sitios principales de una ciudad. Tener direcciones escritas en el idioma local y hacer investigaciones en línea.
Nunca he tenido problemas con los agentes de viajes, ya que he utilizado el mismo durante los últimos 35 a?os y es muy confinable y siempre atenta a los enga?os de hoteles y agencias.
Cq1131 (Estados Unidos)
La semana pasada, me detuvieron dos mujeres que me preguntaron si era estadounidense y si podían practicar su inglés conmigo. Esto sucedió en el centro comercial al lado del Hotel Grand Hyatt. Había escuchado acerca de esta trampa antes, pero ellas parecían sinceras. Me preguntaron si podíamos tomar un café para que pudieran “practicar su inglés”. ?Me la creí porque soy maestra de inglés! Además estaba sola. Acepté, pero en vez de café, me llevaron a una calle aleda?a, cerca del centro comercial, a una casa de té chino.
Ordenaron té y vino para las tres. Hablamos, pero estaban más interesadas en hablar sobre mí que sobre ellas. Finalmente fue momento de pagar. ?Sacaron una carta que se?alaba que cada tetera costaba 750 yuanes! Me pasaron la cuenta. La cuenta total era de 3.000 yuanes (500 dólares). Era obvio que tanto ellas como la casa de té estaban confabuladas. Repetían que utilizara mi tarjeta de crédito. Me di cuenta de que era una trampa para estafar mi tarjeta de crédito. Asustada a morir, dejé 300 yuanes sobre la mesa y corrí.
Seneca (Estados Unidos)
En China, los descuentos son anunciados de forma ruidosa, escritos y dichos en voz alta a través de bocinas.
En la calle oeste de Yangshuo, puedes encontrar palillos adornados hermosamente en una tienda de palillos. No se anuncia una rebaja en los precios, pero los clientes chinos que preguntan acerca de ellos, reciben ofertas de una reducción del 15 porciento, mientras que los laowais son rechazados rudamente con la afirmación de que no existe ningún descuento disponible. En casos aislados, se concedió rencorosamente un descuento del 5 porciento.
NTM2322 (Reino Unido)
Cuando voy a Beijing jamás me uno a los tours.
Podría volverse bastante más caro, es cierto, sin embargo, me divierto y disfruto más cuando voy solo o con mi familia.
Los guías turísticos te llevarán a ver la Gran Muralla, el Palacio de Verano, etcétera. Te dejarán ver algunos hutongs y a algunas tiendas donde probablemente reciban comisiones dependo de cuánto se les compre. Terminarás tu tour comiendo pato Quanjude. Todos están contentos y regresan a casa.
Beijing es mucho más que eso. Hay lugares maravillosos donde puedes disfrutar de la comida típica de la ciudad, espectáculos, centros comerciales y demás, que a menos que vayas solo, jamás probarás o verás porque los guías turísticos jamás te llevan allí.
Antes de unirte a un tour, piensa dos veces.
zakoi (Espa?a)
En 2010, tome un taxi de la calle Nanjing a la estación del sur de Shanghái. El taxímetro se movía más rápido de lo normal. En el camino no pregunté acerca del ritmo del taxímetro. Al llegar a la estación, me pidió pagar 378 yuanes, que era mucho más de la tarifa normal. Cuando no estuve de acuerdo con su precio, el conductor me intentó golpear. Entonces llamé a un policía y le expliqué la situación con mi mal chino. Tra smedia hora de un drama de alto voltaje, la policía alcanzó al taxista. El policía me dijo que el taxímetro era falso y el taxista no tenía licencia para conducir en Shanghái. Gracias al policía, me trataron muy bien.